1. ACEPTA A TUS PADRES
Quien no puede tomar a sus padres, tampoco podrá tomar a una pareja. Imagínate estar en casa de tus suegros y ver cómo tu pareja los insulta o los rechaza. Si así es con sus raíces de vida, ¿qué puedes esperar tú? Lo mismo aplica contigo, si rechazas a tus papás, estás rechazando a tu pareja o la posibilidad de conseguirla.

2. UNA BUENA DOSIS DE UBICOL
¡Ubícate! Ocupa sólo el lugar que te toca. Hay personas que se vuelven “mamá” o “papá” de sus parejas. O al revés, su “hijo(a)”. Algunas más se vuelven “hermanos fraternales”. Ahora checa éstas frases: ÉL: “Te veo como mujer. Veme como hombre.” ELLA: “Te veo como hombre. Veme como mujer”. ¿Notas la diferencia?

3. AMAR A LA PAREJA IMPLICA AMAR A SU FAMILIA
Cuando conoces a una persona ella llega con todo sus sistema familiar detrás de sí. Igual tú, llevas a toda tu familia contigo. Y no te compliques tanto, amar a su familia comienza con algo básico: Aceptarla. De ese nido, de esa historia, de ese clan, viene tu pareja; pero además, esa familia está ahí para ayudarte a mirar los enredos y conflictos de la tuya. En los conflictos de pareja se reflejan los asuntos pendientes de nuestra familia original.

4. ÚNICAMENTE SE PUEDE AMAR LO IMPERFECTO
Haz una lista de lo que pides a un hombre/ una mujer. Ya la tienes? OK! Pues no existe la persona que cumpla todas tus expectativas. El príncipe azul y la princesa rosa sólo existen en los cuentos y ahí están muy bien, nos ayudan cuando somos niños(as); pero si buscas a la pareja perfecta, estás buscando a Dios (Freud diría que a tu papá). Cuando ya eres adulto(a) estás listo(a) para esta frase de poder: “Te tomo tal como eres; así te amo, sin cambiarte nada, absolutamente nada.”

Faltan 5 más, pero esas leyes te las daré en mi próxima entrega. Ha sido demasiada información condensada en éstas líneas y es mejor digerirlas poco a poco. Por cierto, que conozcas el modo de manejar un carro, no significa que sepas conducirlo. Es necesario subirse a uno y probarlo.

Y como no soy la luz al final del túnel, me gustaría que me dieras tu opinión y compartieras tu experiencia personal acerca de estos primeros cuatro principios para formar una pareja feliz.

¿Sabes algo? Cuando escribo de estos temas me doy cuenta cuánto me falta por aprender!

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Feliz semana!

Jesús Piña
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Comentarios:

Comentario de: Laura Alicia Zenil Valdez [Visitante]

Soy una mujer de cuarenta años, profesionista, dedicada a la docencia, mamà y divorciada dos veces, hasta ahora no he encontrado al hombre de mi vida, si bien se, que el hombre perfecto no existe, siento que yo ya no encontrarè a una persona, que me ame por lo que soy, lo que leì me encantò, porque si es verdad, el prìncipe azul solo existe en los cuentos, sinceramente me siento un poco màs tranquila y aunque sè que todavìa no alcanzo la madurez emocional, para ser feliz conmigo misma, al menos, intentarè por todos los medios de tener tranquilidad…gracias.