El amor es como el agua, necesita un cauce para fluir con armonía.
Sin límites, el amor se desborda como en una inundación:
mucha, muchísima agua… pero sin orden.
«¡Es que le di todo mi amor y sin embargo se fue!»
Con tu amor ahogaste a esa persona o la empujaste a escapar antes de que eso pasara.
A los veinte años tuve una novia a la que le di flores, regalos, tarjetas, serenatas, la llamaba a diario y quería estar pegado a ella como chicle… la fastidié con mi cariño y terminó conmigo.
El problema no estaba en el amor, sino en el desorden para amarla.
Ordenar significa poner las cosas en su lugar
donde uno de los principios esenciales para darle orden a tu amor es:
Reconoce tu pertenencia
Muchas veces te desbordas en amor, servicio y ayuda a los demás, para PERTENECER.
Es el intento del niño por ser reconocido, su obsesión para ser visto,
especialmente anda buscando la mirada de sus padres.
Por eso: Hagas lo que hagas, digas lo que digas, seas lo que seas, recuerda:
Ya eres parte de tu familia.
La pertenencia nunca se pierde. Es la vida misma llevada en los genes, en la sangre, en las celulas.
Y de quién te viene? Correcto! De tus papás.
No te trajo la cigüeña ni el angelito bonachón.
Mi padre podrá estar cerca o lejos, mi madre podrá consentirme o castigarme,
pero siempre, siempre, siempre,
estará el vínculo de la vida entre nosotros.
La pertenencia es como el sol, sale para todos, e independientemente de quien seas,
te ilumina y te da calor.
Una vez alguien me dijo: «¡Voy a irme muy lejos pues no soporto a mi familia!»
¿Y sabes algo? Así se fuera a Australia o a Saturno, se los llevaría consigo, van como un chip integrado a su corazón.
Y lo más asombroso es que aunque vivas en Saturno, allá reproducirás las mismas relaciones de tu sistema familiar.
¿Ejemplos? De pronto, te percatas que el autoritarismo de tu jefe es el mismo que el de tu padre,
o que tu pareja manipula de igual manera que tu mamá lo hacía contigo cuando eras niño,
o tal vez descubriste que tu mejor amigo se comporta como lo hacía tu abuelo.
Guarda este mensaje: Los demás son el espejo donde te miras.
Me decía un amigo que Bill Gates, -el hombre más rico del mundo-, ha donado la mitad de su fortuna a fundaciones y obras de caridad.
Personalmente dudo que sólo sea generosidad, veo como hipótesis a un niño buscando ser visto y reconocido por alguno de sus padres.
De cualquier modo, está invirtiendo en la vida.
Cómo darle orden a tu amor?
Hay un tiempo de apretar y otro de soltar, uno para conservar y otro para cambiar,
cuál es el tuyo?
Si estás dando mucho, detente y empieza a tomar.
Si sólo tomas, es momento de dar.
Nadie da lo que no tiene.
Cuando recibas, agradece.
Antes me costaba mucho trabajo recibir, sentía que no lo merecía;
más bien sabía que al tomar, el siguiente paso sería dar.
Mejor sólo daba, daba y daba, para no vincularme con nadie y mantener lejos a la gente.
Hoy lo hago un poco mejor, ya disfruto mis regalos.
El amor con orden respeta la vida de los otros, aún la de tu familia;
Y es capaz de defender el derecho de vivir la propia vida con todos sus riesgos y desafíos.
Este fin de semana, -mientras veía a mi hija dar vueltas en su bicicleta en uno de los circuitos del Parque México-,
recordé cuando ella todavía no sabía manejarla en dos ruedas.
Mi amor desordenado buscaba impedir que se cayera o cometiera algún error,
y una fuerza interna me decía: «No la sueltes! ¡Se va a lastimar!».
Pero otra fuerza aún más grande me decía:
«Respeta su destino. Ella está creciendo y puede hacerlo sola»
Dura lección para mi amor castrante.
Jesús Piña
Invierte en tu Vida!
Comentarios:
Es increíble, me llega en el momento perfecto.
Saludos, Paola M.
Con el mensaje de hoy entiendo que quiza lo ahogue con mi amor, le exigí y espere de él, algo que era incapaz de darme
Y aun con todo el dolor del desprendimeinto y del fracaso, sé que lo mejor para mí es estar lejos de él
2 respuestas a “¿Hay orden en tu amor?”
No importa cuando, ni cuantas veces lo leo, siempre tengo un tema para aplicarlo.
Estremecedor. Llega igual de fuerte y cada vez me cuesta menos trabajo. «FANTASTICO»
Estoy creciendo
GRACIAS JESÚS POR DARME LA MANO Y ENCEÑARME A CAMINAR